A veces eres cascada de un río,
otras, lluvia que encoge el alma,
las más el relajo de mi mente,
sin embargo reconozco …
que en alguna hora me preocupas.
Tienes …
tibia agua de mi boca,
humor dichoso, que me transmites,
mi piel cosida a la tuya …
con puntadas de ardiente cariño,
mi corazón subyugado por tú personalidad.
Dime, que encuentras en mí,
para hacer que tú mirada se estacione
en mis ojos escrutándolos y consiguiendo
que el rubor cambie el color de mis mejillas?
porqué sometes mi boca a la mudez
vergonzante del que se siente observado?
es que acaso disfrutas retando a mí timidez?
Nada de esto impedirá que te ame.
No hay comentarios:
Publicar un comentario